miércoles, 13 de junio de 2012

Aebli


Es ampliamente reconocida la impronta de las experiencias cotidianas y las escolares como dimensión formativa. El fragmento de Aebli (1988) transcripto a continuación, fundamenta y argumenta esta posición:

“...toda persona aporta, a partir de su experiencia de la vida cotidiana, habilidades y capacidades que puede ampliar y profundizar hasta lograr las destrezas propias de la enseñanza, hasta la “aptitud para enseñar”. Las dotes para la enseñanza no son ni una misteriosa predisposición natural, ni una ciencia que se puede inculcar al hombre a partir de la nada. La competencia didáctica se constituye a partir de comportamientos elementales que se han ido desarrollando en la vida diaria y se van diferenciando a partir de actividades que cualquier persona despliega en contacto con los demás".

Con respecto a este fragmento me pareció importante compartirlo con todas ustedes, mis compañeras desde el inicio de esta carrera, ya que creo que es un reflejo de lo que se nos propuso en este taller de EDI de Prácticas.

Espero que les guste!!!! 

Saludos, Sofi

martes, 12 de junio de 2012

Gustavo Roldán, Literatura para grandes y chicos!!


Gustavo Roldán


El conocer la obra de Gustavo Roldan a través de la materia de Literatura en la Educación en el Nivel Inicial, ha permitido enriquecerme como lector, promover la reflexión y la imaginación, construir una postura crítica. Empezar a ver las realidades imaginarias o sociales, que el autor pone de manifiesto en sus historias, su estilo, sus realidades y sus pensamientos acerca de las  problemáticas culturales y sociales.

A través de su obra, podemos encontrarnos viviendo otras historias, divertirnos  y sorprendernos, asumir  como lectores una posición reflexiva, donde uno puede imaginarse mundos posibles, a través de una escritura concisa, clara, fresca, ágil, que recorre historias de los montes, de su geografía, su fauna, su cultura, compartiendo con otros, la magia del clima creado por cada uno de sus libros.
Todo esto hizo querer seguir leyendo sus textos, con esa magnífica llave que poseen sus libros, donde pueden abrirse puertas, y llevarnos a lugares poco conocidos, dónde  se encuentran cosas que uno nunca vio, en un ámbito lleno de verdades, de lo prohibido o lleno de imaginación.

Este escritor supo ganarse con sus manos y su pluma, el ser reconocido como, el carpintero, el mago, el docente, un gran ilusionista, que deja pasmados a sus lectores, que tiene la habilidad para seducir y convencer con sus palabras, ya que el humor y lo inesperado está en la esencia de sus relatos.
Cuando somos adultos vamos perdiendo algunas de nuestras habilidades lectoras, y no le damos importancia a la literatura infantil, porque como adultos pensamos que es solo para chicos y que nosotros no tenemos nada que ver con eso, o que ya no tenemos tiempo para sentarnos a leer un cuento. Pero hoy nos damos cuenta de que, quienes llevan estas historias fabulosas a los niños y hacen conocer la magia de los cuentos, somos los adultos, a través de los cuentos que los escritores hayan hecho, los cuales nos unen culturalmente y que funcionan como un hilo conductor hacia una literatura que nunca termina.
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Desafortunadamente Él ya no está con nosotros, pero viven en sus textos, que con tanto ímpetu, escribió para grandes y chicos.


Los coristas...


Una mirada crítica en cuanto a la práctica pedagógica…



La película Los coristas, y muchas otras basadas en historias reales son un fiel reflejo de la posibilidad de cambios educativos.
El juego de las tensiones, claramente visible, demuestra la constante oposición entre dos formas de ver el mundo y dos maneras de posicionar al sujeto de aprendizaje.
A través de este material fílmico es posible determinar que de acuerdo a las prácticas educativas elegidas, se pueden generar cambios significativos y duraderos.
Los primeros, visibles en la respuesta de los niños de manera inmediata frente a la nueva propuesta y trato; los segundos, comprobados en la vida de por lo menos dos de los protagonistas, que logran trascender aquello que su condición cultural les tenía preparado como un destino ineludible.